Promesas...promesas....promesas. ¿Hay algo que caracterice mejor a quienes corren tras el poder en nuestros paisajes criollos? En este acrílico sobre cartón encontramos remembranzas de la obra de Munch (El grito), Brueguel, y el maestro panameño Trujillo. Y los personajes aluden a las diversas individualidades que han conformado nuestra particular historia: el fraile, símbolo de una iglesia que muchas veces no ve, no escucha, pero no pierde ocasión de pronunciar sus dogmas y sentencias absolutas;el conquistador y el indígena, símbolos de nuestra herencia histórica;el personaje cuya cabeza tatuada con el código de barras alude a la obsesión contemporánea por la riqueza material, ignorando que hay riquezas por adquirir en muchos otros aspectos de la existencia; también está aquél cuya vida semeja un crucigrama, cuya vida se va armando mecánicamente con solo llenar los espacios en blanco; y, finalmente, el que grita, angustiado ante tal espectáculo.jebriceno64@hotmail.com
